martes, 30 de septiembre de 2008

Retazos...

Quería ser flor, pero solo conseguí sonreír. Luego me dijiste que aun así lograría un milagro... al verte sonreír, lo entendí...

Desahogo XI

Pudiera comenzar este texto diciendo ‘Érase una vez...’... pero esto es algo falso, nunca existió, ni existe, ni existirá. Yo nunca he escrito esto; y tú, querido lector (o no lector?), no estás leyendo esto. Es producto de nuestra imaginación, que juega al que más sabe, al que más lee, al que mejor escribe, al más leído, al más real, al más aéreo, al más humano.

Humano. Me gusta esa palabra. Sobre todo porque todos asumimos que lo somos. Dominadores de los cielos, de la tierra y el agua. Dominadores de todo, menos de nosotros mismos. Fuertes por fuera, blandos por dentro.

Somos huevos. De exterior duro, pero muy vulnerables y fáciles de quebrar, y de interior tan blando, que parece líquido. Chocamos con cualquier roca, pared, hecho, persona, circunstancia... y al instante perdemos nuestra esencia. Quebrados, nos declaramos muertos, y terminamos en el caldero de cualquier mortal. Aplastados, con el corazón duro o blando. O terminamos endurecidos bajo nuestra cáscara tratando de ocultar nuestro ya duro, o medio blando corazón (o lo que queda de él).

Para quienes se pregunten si estoy loca o lo parezco por esto que estoy escribiendo, sepan que de eso todos tenemos un poco. El ocio forzado por un desempleo inoportuno y no deseado me lleva a reflexiones de este tipo y a la búsqueda de algo, que pronto sabré qué es.

Les contaré. Estoy bajo los efectos de una depresión. Sí, estoy mucho más tranquila, es lo que me permite reconocer mi realidad. Fue preciso hacerlo, pues estaba invirtiendo mucha energía en resentimientos, y en la búsqueda de respuestas que no me daban la solución a nada.

Dije mi realidad, y es cierto. Yo creé esta realidad, cual yo? No lo sé. Pero una consecuente cadena de hechos buenos y malos, voluntarios o involuntarios, me llevaron a lo que hoy vivo. En mis constantes preguntas de ‘por qué’ descubrí, que mi inhumanidad fue la que me llevó hasta aquí, para aprender algo, que posiblemente debí haber aprendido hace mucho. Y escribiendo esto ahora, hoy domingo a las 19:14, es que me doy cuenta en parte de la lección que me está siendo impartida en estos días.

Caí presa en los juegos de los Rojos, por no saber esperar y no hacer uso de la autoobservación. No supe darme cuenta de lo que pasaba. Actué mecánicamente en muchas cosas. Pero luego recuerdo que el fruto no nace hasta que está listo. Aunque tenia las herramientas, tal vez no era tiempo de usarlas, o peor aun, tal vez ni sé usarlas; y no trato de justificarme.

Simplemente ahora busco canalizar mis energías en resolver problemas externos, para luego resolver algo mío, muy mío... o debería ser al revés?

No sé. Solo le pido al que desde arriba nos cuida, que me dé luz, paz, y me llene de Amor, de ese que solo Él sabe dar, para poder un día sentarme a leer este post y reírme de esta etapa sombría de mi vida.

A quienes me han apoyado en este difícil proceso, Gracias!! Su amistad vale oro. Gracias por los consejos, los ánimos, por ser como son, y hacerme saber que puedo contar con ustedes. Gracias!!

Casi casi estoy de vuelta!!

Ya verán :D

Mañana, mañana es mejor!! (Cerati ‘mode on’)