Ayer...

Ayer, contrario a mis planes y/o/u deseos, me quedé en casa. No salí ni a cantarle las mañanitas al Sol. Creo que lo ví asomarse por la ventana de mi cuarto (dinero?, cojoyo! que mala costumbre la mía, de mi habitación).


Pues no pienso hacer un relato de mi día de independencia, salvo que cuanto chiste se me ocurrió al oir a mi vecina gritando e'pa lante que vamo' y entre veces viendo el momento en que Leo(nel) iba a timonear el metro (me tienen jarta el tema, aunque en su momento lo usaré -el metro-); el hijo de ella decía que el metro no es gracias a Dios, sino gracias a Leo, jajajja de momento aparecen en las casas altares con una foto de Leo monta'o en el metro lleno de velones, rezando por los imposibles jajaj.


Ya basta de profanación jiji, el caso de esto que ahora escribo es que buscando unas tijeras en mi cartera (que qué hago yo con tijeras en mi cartera? umm tendrías que ver con to' lo que ando, y una tijera no sorprendería a nadie) me encontré con este libro (me entienden ya?) y me recordé que lo leí ayer.


Ese es el meollo (no memeo, lol :P) de este post. Pues ayer, a causa de una cuarentena provocada que me impidió salir, me decidí a leer este título que me lo prestó un amigo. Sucede que este título es muy famoso en los profiles de hi5 y páginas aledañas al igual que su primo hermano libro 'el alquimista' o cualquier tipo de literatura light. Aun no entiendo cómo una amiga mía se había tardado tanto en leerlo, mi ignorancia me había llevado a pensar que era de gran volúmen.


Pero noo, es un bocadillo de fácil digestión, me puso muchísimo a pensar y a reflexionar en cuestiones que en muchos momentos de mi vida he hecho sentada en flor de loto 'mentalmente hablando' (of course). Es una guía fantástica para quienes en un punto 'x' de su vida se sienten estancados en su pasado y viven pensando en su futuro sin disfrutar su presente (que trabalenguas/mentes/dedos). Claro, es solo mi punto de vista, no es tampoco para tomarlo como biblia y salir corriendo y comprarse una casa en bocachica.


Me hizo entender que el futuro se forja en el vivir diario, en el ahora, no tanto como dicen, de vivir como si fuera el último día, pero sí aprovechar el tiempo. Que hay que ver los pequeños milagros de la vida como tales, no dejarlos pasar inmutados. Celebrar la vida! Aunque por momentos perdamos la fe, seguir creyendo... y estar consciente de que siempre hay Alguien (y no aylan) pendiente a nosotros... que asombrarse al contemplar un árbol o un aterdecer sentada en un banco en el malecón, no es síntoma de consumo de drogas, es solo reconocer vida donde vida hay. Que por más escépticos que podamos llegar a ser, siempre dentro estará latente algo que nos recuerda la existencia de ese Ser superior, de ese Maestro que en perfecta sinfonía convierte todo nuestro Universo...


Guaii como que si sigo, se me pelarán los dedos de tanto escribir jijijiji, en conclusion, no fue un desperdicio la tarde de ayer leyendo este librito y escuchando mi seleccion de sabina/pedro guerra/caetano/joan manuel/gustavo ceratti.


Es cuanto. He dicho.