El libre albedrío es la facultad que tengo de elegir el bien o el mal. Dios es tan bueno tan bueno conmigo, con todos, que respeta mi facultad para elegir; respeta mi libertad, nuestra libertad. Y qué hago con mi libre albedrío? Desastres y más desastres, aun no he aprendido a hacer buen uso de mi libertad, errores y más errores... pero ya no!!
Señor toma mi libertad, dáme el valor como lo tuvo la virgen María de hacer cumplir tu voluntad. Señor, me entrego a tí. Que se haga en mí tu voluntad. Que cada día mis decisiones estén más cerca de tu voluntad, que es Bien y Amor. Amén.
1 comentario:
El libre alberdrio, como mencionas, es la manifestación última de amor que el Señor nos regala, puso si hermosa creación a nuestros pies y aun así, despues de todo ese esfuerzo.... Nos da la libertad de decidir AMARLO y dejarnos amar por el.
Muy interesante escrito.
Publicar un comentario